Sánchez, derrotado en RTVE, arremete contra Redondo y Ábalos
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Platos rotos en todas las direcciones. Humilló por dos veces a Rosa María Mateo. Deterioró su imagen al abrir una de las peores crisis en RTVE. Tensó al máximo la relación con Atresmedia. Y dejó en evidencia el plan de campaña del PSOE y a sus responsables.
Finalmente, Pedro Sánchez participará en dos debates en televisión: el 22 de abril en RTVE y el 23, en Atresmedia, tal como le habían exigido los partidos de la oposición.
La Moncloa y el PSOE, según los círculos del presidente, aseguraron que fue el propio presidente quien lo decididó, recriminando a la vez de esta cadena de crisis al Comité Electoral del Partido Socialista Obrero Español. Es decir, crítica directa al gurú de cabecera del presidente, Iván Redondo, y el ministro de Fomento y secretario de Organización, José Luis Ábalos.
Según fuentes socialistas, Pedro Sánchez ha querido dejar claro que “hubiera preferido realizar un único debate entre las principales formaciones estatales que concurren a las elecciones”. Ha criticado las trabas “de los distintos partidos y de los operadores públicos y privados de alcanzar un acuerdo en la organización de una única emisión televisiva tal y como es la norma internacional repetida en todas las democracias avanzadas del mundo”.
Las heridas del escándalo de los debates televisados están abiertas. Ha irrumpido a un primer plano el retrato más descarnado de un político sin palabra ni compromiso, sorprendentemente oportunista hasta el extremo, y manipulador de la televisión pública.
Atención a dos días inéditos tras la Semana Santa y a un Viernes Santo volcánico por las reacciones que se están produciendo.
Finalmente, Pedro Sánchez participará en dos debates en televisión: el 22 de abril en RTVE y el 23, en Atresmedia, tal como le habían exigido los partidos de la oposición.
La Moncloa y el PSOE, según los círculos del presidente, aseguraron que fue el propio presidente quien lo decididó, recriminando a la vez de esta cadena de crisis al Comité Electoral del Partido Socialista Obrero Español. Es decir, crítica directa al gurú de cabecera del presidente, Iván Redondo, y el ministro de Fomento y secretario de Organización, José Luis Ábalos.
Según fuentes socialistas, Pedro Sánchez ha querido dejar claro que “hubiera preferido realizar un único debate entre las principales formaciones estatales que concurren a las elecciones”. Ha criticado las trabas “de los distintos partidos y de los operadores públicos y privados de alcanzar un acuerdo en la organización de una única emisión televisiva tal y como es la norma internacional repetida en todas las democracias avanzadas del mundo”.
Las heridas del escándalo de los debates televisados están abiertas. Ha irrumpido a un primer plano el retrato más descarnado de un político sin palabra ni compromiso, sorprendentemente oportunista hasta el extremo, y manipulador de la televisión pública.
Atención a dos días inéditos tras la Semana Santa y a un Viernes Santo volcánico por las reacciones que se están produciendo.
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