River Plate ante Boca Juniors, las cartas de Gallardo y Schelotto
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River Plate
Por parte de River Plate, Marcelo Gallardo con un dibujo táctico y estratégico de un 1-4-4-2 o un 1-5-4-1:
- Portería: Armani.
- Defensa: Montiel, Martínez Quarta, Maidana, Pinola, y Casco
- Centrocampistas: E. Palacios, E. Pérez, Ponzio, G. Martínez.
- Delantero: Pratto.
Marcelo Gallardo ha sopesado varias alternativas como un 1-5-4-1. También, jugar con tres defensa o con una línea de cinco. La segunda opción estratégica es la de un poderoso centro del campo con cinco jugadores en acción. Finalmente estudió un ataque de una línea de dos con Lucas Prato junto a Rodrigo Mora o Julián Álvarez.
Gallardo no puede contar con Quintero, y maneja la duda del joven Julián Álvarez. Lesionado también Scocco y suspendido Santos Borré puede resentirse con solo Pratto como referencia.
Boca Juniors
Por parte de Boca Juniors, Guillermo Barros Schelotto estudia un 1-4-3-3 o un 1-4-1-4-1:
- Portería: Andrada/Rossi.
- Defensas: Buffarini, Izquierdoz, Magallán, y Olaza.
- Centrocampistas: Nández, Barrios, y P. Pérez.
- Delanteros: Pavón, Benedetto y Ábila.
Barros Schelotto confía en su poder ofensivo. Recupera a Pavón y podría formar casi tridente con Benedetto y Wanchope. La pegada xeneize ha sido su arma en esta Copa Libertadores, aún con recambio en el banquillo como el Apache Tévez.
La final inédita
El Santiago Bernabéu decide el campeón de la Copa Libertadores en una histórica final, un Superclásico argentino y sudamericano exportado a Madrid en una sucesión de lamentables sucesos, que se espera queden atrás cuando el balón eche a rodar a 10.000 kilómetros de Buenos Aires.
Una final interminable, llena de obstáculos de todo tipo, hasta llegar a la capital de España y el estadio del Real Madrid por mandato de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol). Argentina cayó en vergüenza una vez más por los violentos del fútbol y el organismo sudamericano sacó la final del país y del continente en una sucesión de medidas sin precedentes.
El 10 de noviembre debía jugarse la ida en la Bombonera y al final fue un día después por lluvias torrenciales, con el 2-2 que mantiene en el aire el título en lo deportivo. Dos semanas después, el sábado 24, se esperaba la vuelta en el Monumental, pero el ataque al autobús de Boca Juniors, gases lacrimógenos incluidos, terminó con varios jugadores xeneizes en el hospital y el partido aplazado.
El domingo llegó la suspensión definitiva, por la desigualdad deportiva dijeron en la Conmebol, con Boca pidiendo la descalificación de River. Un recurso que murió a 24 horas del desenlace del Bernabéu, con el TAS rechazando su petición, en el afán de ver a su vecino descalificado como ocurrió con Boca Juniors cuando su afición atacó a jugadores millonarios con gas pimienta en 2015.
Tras reuniones y falta de acuerdo entre los equipos, la Conmebol pidió asilo en Madrid y el Santiago Bernabéu, feudo blanco que decide al sucesor de Gremio, campeón en 2017. La capital española se hizo cargo en tiempo récord de organizar la Champions americana, con dos rivales históricos de la misma ciudad, con el peso de los dos escudos más grandes al otro lado del charco.
Madrid, con experiencia en grandes eventos pero con el desconocimiento de las aficiones y el antecedente violento, aceptó el reto en medio de un despliegue de seguridad sin precedentes. La preocupación es el barrabrava (barra brava), la hinchada radical y vilenta, aunque fuera de su entorno se espera se convierta en un hooligan bien controlado por la Policía Nacional y no esa facción que maneja y forma parte del sistema de su fútbol.
El balón quiere ser protagonista y ese 2-2, sin importar los goles de visitante de River Plate, mantiene la igualdad de un partido que irá a la prórroga y los penaltis si aguantan en tablas. Tampoco está el miedo a perderse la final por las amarillas, con Boca Juniors a por su séptimo título de Copa Libertadores (1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007) y River Plate que quiere el cuarto (1986, 1996 y 2015).
Perdida la 'localía', que dirían, River Plate puede sentirse en casa por el espíritu de Don Alfredo, un Di Stefano que se dio a conocer en el equipo de la franja antes de ganar cinco Copas de Europa con el cuadro de Santiago Bernabéu. El actual técnico del Real Madrid, Santiago Solari, también debutó en River Plate.
La ida dejó un bonito intercambio. Wanchope hizo el 1-0 para los azul y oro, pero Lucas Pratto igualó de inmediato. Benedetto, que entró por el lesionado Pavón, adelantó de nuevo a los locales pero el tanto en propia de Izquierdoz dejó el 2-2.
Ficha técnica
- Árbitros: Andrés Cunha (URU).
- Estadio: Santiago Bernabéu.
- Hora TV: 20:30 (horapeninsular española). Movistar #Vamos y Liga de Campeones.
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