Se investiga la conexión entre los atentados de Ankara y Estambul

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Estambul, según confirmaron mandos policiales, estuvo en las horas de la Nochevieja con una vigilancia de 17.000 policías. En el dispoitivo de seguridad había agentes secretos, algunos de ellos vestidos de Papa Noel.





Pese a estas medidas de vigilancia fallaron los servicios de inteligencia al no haber identificado la Sala Reina, discoteca exclusiva al lado del Bósforo, como zona de alto el riesgo. Analistas dijeron que fue una temeridad que sólo hubiera dos vigilantes y no se hubieran instalado tres anillos de seguridad para identificar y registrar a todas las personas que escogieron este sitio para celebrar el Año Nuevo.

Sólo hubo un terrorista. Se acercó disfrazado de Papa Noel abatiendo al portero de la discoteca y el único vigilante de apoyo. 

Asesinó a quemarropa para después dejar en el suelo de la discoteca el arma, un Kaláshnikov AK-47, donde yacían heridos y fallecidos, junto a charcos de sangre, y darse a la fuga. Las cámaras de seguridad recogieron dramáticas imçagenes.

Entre las víctimas mortales hay una joven israelí, un libanés, un belga y tres indios. Entre los heridos hospitalizados, al menos 24 extranjeros, entre ellos saudíes, marroquíes, libaneses y libios, según los nuevos datos facilitados por las autoridades turcas. 

¿Un mismo retrato robot en el asesinato del embajador de Rusia en Ankara y esta masacre a orillas del Bósforo? ¿Participó un expolicía o un exagente de seguridad para vengar los bombardeos sobre Alepo? Todas las pistas se están siguiendo junto a las voces de quienes han vuelto a advertir del desmantelamiento de estructuras de inteligencia y la purga de mandos competentes.

La reivindicación de ISIS

Estado Islámico (ISIS, Daesh) reivindicó la autoría. En un comunicado difundido a través de internet, afirmó que el autor de la matanza, que sigue huido, es un "heroico soldado del califato" que "golpeó una de las más famosos discotecas donde los cristianos celebran su fiesta apóstata".

En el texto, se detalla que el terrorista usó granadas y una ametralladora y causó unas 150 víctimas entre muertos y heridos. Se afirma que esta acción es en "venganza" por los bombardeos contra musulmanes que efectúa Turquía en territorio sirio, por lo que acusa al gobierno de Ankara de ser "servidor de la Cruz".

"Que el Gobierno apóstata de Turquía sepa que la sangre de los musulmanes que se está derramando por los bombardeos de sus aviones va a convertirse en fuego en su propia casa", se dice en el texto del grupo yihadista.
 

- Ver también, Baghdadi declara la guerra a Turquía con una masacre en Estambul (Hechos de Hoy)
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