Incógnita de los platos rotos entre Donald Trump y Enrique Peña Nieto
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En México, Enrique Peña Nieto y su ministro de Exteriores, Luis Videgaray, han quedado golpeados e impactos en sólo una semana por Donald Trump. Sólo Andrés Manuel López Obrador (AMLO), líder de Morena (Movimiento de Regeneración Nacional) ha resistido este vendaval. AMLO, El Peje, emerge con fuerza en un escenario muy imprevisible.
En Washington, tras recibir a la primera ministra del Reino Unido, Theresa May, Donald Trump ofreció su primera conferencia de prensa anunciando una conversación de una hora con Enrique Peña Nieto.
Donald Trump dijo que su relación con Enrique Peña Nieto es “muy buena". "Siento un gran respeto por México, amo a los mexicanos, trabajo con mexicanos todo el tiempo", dijo desde la Sala Este de la Casa Blanca.
Pero a la vez apuntó que México "nos ha hecho parecer tontos” con el Tratado de Libre Comercio que “ha dejado un déficit de 60.000 millones de dólares" con una "frontera blanda y débil".
Sobre la conversación ofreció más luz el comunicado de Los Pinos. Se aseguró en Ciudad de México que Enrique Peña Nieto ha impuesto a Donald Trump no hablar en público del muro con México. Por el momento Donald Trump parece haberlo aceptado.
Los Pinos señaló que ambos presidentes "reconocieron sus claras y muy públicas diferencias de posición en este tema tan sensible, y acordaron resolver estas diferencias como parte de una discusión integral de todos los aspectos de la relación bilateral".
Por el momento, Donald Trump arremetió con virulencia contra México y Enrique Peña Nieto suspendió la cumbre de la Casa Blanca llevando la alarma al Partido Republicano. En su marcha triunfal de siete días, Donald Trump parece haber pisado en falso teniendo que rectificar y enderezarse. Pero, conociendo su espíritu negativo, nada se puede afirmar sobre el inmediatio futuro de las relaciones bilaterales.
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