Estados Unidos y Unión Europea, de pactar con Obama a guerra con Trump
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Los tuits de Donald Trump:
- "When a country Taxes our products coming in at, say, 50%, and we Tax the same product coming into our country at ZERO, not fair or smart. We will soon be starting RECIPROCAL TAXES so that we will charge the same thing as they charge us. $800 Billion Trade Deficit-have no choice!"
- "We must protect our country and our workers. Our steel industry is in bad shape. IF YOU DON’T HAVE STEEL, YOU DON’T HAVE A COUNTRY!"
(Cuando un país grava nuestros productos llegando a, digamos, 50%, y gravamos el mismo producto que entra en nuestro país a cero, no es justo o inteligente. Pronto empezaremos los impuestos recíprocos para que nos cobren lo mismo que nos cobran. $800 mil millones déficit comercial-no tienen elección!)
(Debemos proteger a nuestro país y a nuestros trabajadores. Nuestra industria siderúrgica está en mal estado. ¡ Si no tienes acero, no tienes un país!)
Habrá un final a las pesadillas que envuelven la Casa Blanca. Cuando se escriba lo que significó la llegada de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos, estos días figurarán en los de la gran tormenta política y económica con la Unión Europea.
El anuncio el jueves de nuevos aranceles al acero y al aluminio fue explosivo. Puso en alerta y respuesta inmediata a la Unión Europea advirtiendo de represalias. Supuso una bofetada en toda regla para México y Canadá, envueltos en la difícil negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) (North American Free Trade Agreement, NAFTA).
El secretario de Comercio, Wilbur Ross, en una entrevista en la cadena televisiva CNBC, minimizó el impacto sobre el acero. El arancel global será del 25%. Sobre el aluminio, 10% al importado de China, Alemania, Canadá o México.
No es sin embargo un tema menor. El déficit comercial figuró en la agenda de Donald Trump para llegar a la Casa Blanca situando a México y China (República Popular de China) como las bestias negras, el enemigo a identificar. La respuesta al principio de América primero llegó en primer golpe por abandonar el Tratado Comercial Pacífico (TPP). Siguió con neutralizar y parar el proyecto de nuevo acuerdo con Europa (el TTIP). Y apunta ahora a cuestionar el Nafta e incorporar aranceles. Las hostilidades han comenzado.
- "When a country Taxes our products coming in at, say, 50%, and we Tax the same product coming into our country at ZERO, not fair or smart. We will soon be starting RECIPROCAL TAXES so that we will charge the same thing as they charge us. $800 Billion Trade Deficit-have no choice!"
- "We must protect our country and our workers. Our steel industry is in bad shape. IF YOU DON’T HAVE STEEL, YOU DON’T HAVE A COUNTRY!"
(Cuando un país grava nuestros productos llegando a, digamos, 50%, y gravamos el mismo producto que entra en nuestro país a cero, no es justo o inteligente. Pronto empezaremos los impuestos recíprocos para que nos cobren lo mismo que nos cobran. $800 mil millones déficit comercial-no tienen elección!)
(Debemos proteger a nuestro país y a nuestros trabajadores. Nuestra industria siderúrgica está en mal estado. ¡ Si no tienes acero, no tienes un país!)
Habrá un final a las pesadillas que envuelven la Casa Blanca. Cuando se escriba lo que significó la llegada de Donald Trump a la Presidencia de Estados Unidos, estos días figurarán en los de la gran tormenta política y económica con la Unión Europea.
El anuncio el jueves de nuevos aranceles al acero y al aluminio fue explosivo. Puso en alerta y respuesta inmediata a la Unión Europea advirtiendo de represalias. Supuso una bofetada en toda regla para México y Canadá, envueltos en la difícil negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) (North American Free Trade Agreement, NAFTA).
El secretario de Comercio, Wilbur Ross, en una entrevista en la cadena televisiva CNBC, minimizó el impacto sobre el acero. El arancel global será del 25%. Sobre el aluminio, 10% al importado de China, Alemania, Canadá o México.
No es sin embargo un tema menor. El déficit comercial figuró en la agenda de Donald Trump para llegar a la Casa Blanca situando a México y China (República Popular de China) como las bestias negras, el enemigo a identificar. La respuesta al principio de América primero llegó en primer golpe por abandonar el Tratado Comercial Pacífico (TPP). Siguió con neutralizar y parar el proyecto de nuevo acuerdo con Europa (el TTIP). Y apunta ahora a cuestionar el Nafta e incorporar aranceles. Las hostilidades han comenzado.
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