Corea del Norte, primera prueba para Kellyanne Conway y Donald Trump

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Donald Trump afirmó que frenará los planes nucleares de Corea del Norte. A través de Twitter respondió a Kim Jong-un y mostró sus críticas a República Popular China. "Corea del Norte acaba de declarar que está en la última fase de desarrollo de un arma nuclear capaz de llegar a zonas de Estados Unidos. ¡No pasará!", escribió.



También apuntó a Pekín. "China ha estado llevándose cantidades enormes de dinero y riqueza de Estados Unidos en un comercio totalmente volcado en un lado, pero no ayudará con Corea del Norte. ¡Qué bonito!", fue su ácido tuit.

La primera crisis para Donald Trump llega rápidamente y puede estar focalizada en el mar de China. Corea del Norte ha desvelado que está ultimando los preparativos para realizar una prueba con un misil balístico de alcance intercontinental. Pretende hacerse con misiles de larga distancia que permitan alcanzar el territorio de Estados Unidos.

Antes Donald Trump afirmó que Estados Unidos debía "reforzar y expandir enormemente su capacidad nuclear hasta que el mundo entre en razón respecto a las armas nucleares".

Las tensiones en torno a Corea del Norte suponen un asunto serio y peligroso. Para Kellyanne Conway, que aparece como la principal consejera del presidente electo tanto a nivel doméstico como exterior, una extraña y poderosa figura, Corea del Norte es un desafío con cuatro posible alternativas:

- Un pulso con Pekín. Obligar a República Popular China a presionar a Kim Jong Un para poner fin  a su carrera de misiles. Si no hay colaboración ni éxito, posibles presiones sobre Pekín en otros escenarios (diálogo con Taiwán y presiones comerciales). Es una vía que puede abrir conflictos en todas las direcciones.

- Presión mayor con una vía de sanciones sanciones. 

- Iniciativas militares. Atención al escenario más peligroso para Donald Trump. Corea del Norte realizó dos pruebas nucleares en 2016. Desde la época de George W. Bush y de Barack Obama permanece como incógnita la amenaza militar que representa realmente Corea del Norte y su capacidad para situar una ojiva nuclear en un misil. 

- Abrir un diálogo con Kim. Una reunión en Pyongyang con Kim sería audaz. Un golpe de efecto con el sello de Trump. Una reunión del presidente de los Estados Unidos con el líder de un país donde se violan sistemáticamente los derechos humanos. Una iniciativa muy polémica con riesgos para Trump. ¿Es esa la estrategia que acaricia Kellyanne Conway.
 

- Ver también, Trump tras Obama, Siria, y la arrogancia de Putin, retos de Guterres (Hechos de Hoy)
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