Ataque a Pearl Harbor, el gesto de Abe y Obama frente a Trump
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Shinzo Abe fue recibido por el gobernador David Ige. Depositó una corona de flores en un memorial de la isla de Oahu y otra en el National Memorial Cemetery of the Pacific. Después se encontró con Barack Obama en el corazón de la base de Pearl Harbor.
Se trató de una visita histórica e inédita. Shinzo Abe se convirtió en el primer líder de Japón que junto a un presidente de Estados Unidos rindió homenaje a la memoria de las víctimas de lo que fue el cobarde ataque nipón. En 1951 el primer ministro Shigeru Yoshida hizo una primera visita pero en un marco muy distinto y de bajo perfil. También lo hicieron en la década de los cincuenta los primeros ministros Ichiro Hatoyama y Nobusuke Kishi. Aquellos tres actos fueron discretos y mantenidos en segundo plano tanto en Japón como en Estados Unidos.
Esta vez el marco y la trascendencia fue muy diferente. Tanto Barack Obama como Shinzo Abe llenaron de significado el acto en Pearl Harbor, la mítica base naval de Estados Unidos en Hawái. El círculo se cerró. Barack Obama había visitado antes Hiroshima, la ciudad martirio de Japón que fue devastada por primera bomba atómica.
El mensaje de ambos líderes fue muy directo para Donald Trump cuya presidencia es una gran incógnita abierta a lo mejor y lo peor.
Conviene recordar lo dicho por Donald Trump:
- Sobre Japón: "Sabéis que tenemos un tratado con Japón, y si Japón es atacado, nosotros tenemos que usar toda la fuerza y el poder de Estados Unidos. Si nosotros somos atacados, Japón no tiene que hacer nada. Pueden quedarse en casa viendo un televisor Sony, ¿de acuerdo?".
- Sobre la visita de Barack Obama a Hiroshima: "¿Alguna vez habla el presidente Obama del alevoso ataque a Pearl Harbor mientras está en Japón? Miles de vidas americanas perdidas".
Barack Obama está escribiendo el final de su mandato en la Casa Blanca. El acto en Pearl Harbor, junto a Shinzo Abe, es un gesto de profundo perdón, amistad y reconciliación. Si Donald Trump quiere destruirlo o respetarlo, es una de las cuestiones abiertas e inquietantes de un presidente electo todavía errático en vísperas de jurar su cargo.
- Ver también, Barack Obama está seguro de que hubiera derrotado a Donald Trump (Hechos de Hoy)
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