Arabia Saudí reconoce el asesinato en Estambul de Jamal Khashoggi

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Arabia Saudí rompió su silencio. Observa lo letal del caso Khashoggi en su relación con la Unión Europea. Pero teme más una relación imprevisible de Donald Trump pasando de amor a odio.



Adel al Jubeir, ministro de Exteriores y exembajador en Washington, admitió por primera vez la muerte del periodista (y disidente para algunos) Jamal Khashoggi en el consulado de Arabia Saudí en Estambul el 2 de octubre. En sus declaraciones a la cadena FOX admitió que fue "un tremendo error".

Reconoció que no sabe cómo murió Khashoggi aunque en Riad, ante el temor de los datos de la investigación de Turquía, se señaló de forma oficiosa que se asfixió cuando quienes intentaban hacerle regresar a su país trataron de contener sus gritos.

Adel al Jubeir, que acumula una experiencia de relación con los medios, fue directo con la FOX. Confirmó plenamente que "fue asesinado en el consulado". "No sabemos los detalles de cómo fue. No sabemos dónde está el cuerpo", reconoció a continuación. Señaló además que quienes le asesinaron intentaron encubrir la muerte a las autoridades de Arabia Saudí.

"Estamos decididos a levantar hasta la última piedra. Estamos decididos a castigar a quienes sean responsables de este asesinato", insistió en la explicación de que fue un dramático error y una chapuza macabra a la vez. Sorprendió sin embargo que calificara por primera vez la muerte de "asesinato".

Al Jubeir atesora una reputación de diplomático de larga carrera en Washington, más de diez años. No pertenece a la saga de los príncipes. Pero cuenta con el apoyo en todas sus acciones de la familia del rey SalmánAl Jubeir habría señalado en Riad que esta tormenta pasará pero solo si hay decisión de afrontar lo sucedido y lamentarlo profundamente. Recomendó al rey Salmán y al príncipe heredero, Mohamed bin Salmán, MBS, comunicar su pesar de forma personal al hijo de Jamal Khashoggi.

En Riad, en fuentes diplomáticas occidentales, se intuye una tormenta de fondo. Y el temor de Arabia Saudí a las revelaciones de Turquía. Si esta crisis, que es trágica y espantosa, se desboca, podría afectar la posición y la ambición de MBS. Si eso sucediera sería un terremoto interno muy profundo en el reino de la saga de los 15.000 príncipes.
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